saludos desde Madrid
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saludos desde Madrid
Saludos cordiales, queridos compañeros.
Mi nombre es Christian Miró (para los argentinos, nada que ver con "Cris Miró"... por suerte o por desgracia, ese es mi nombre verdadero).
Soy argentino, pero vivo en España desde hace casi 20 años (y tengo 39)
Soy mago profesional, y tengo la suerte de vivir de ello desde hace bastante tiempo. Tengo una tienda y escuela de magia en "Parla", el pueblo donde vivo, a las afueras de Madrid.
Soy el presidente de AMAPE (Asociación de Magos Aficionados y Profesionales de España).
Mi especialidad es el mentalismo cómico. Es con lo que mas trabajo, y ademas de los espectáculos, viajo por casi toda España, dando conferencias para magos sobre como meter humor en el mentalismo, y en la magia en general.
Hace un par de años, empecé a estudiar la técnica de la ventriloquia por pura curiosidad profesional. Nunca pensé en dedicarme a ello.
Pero hace unos meses, tuve una experiencia casi mística, que les voy a contar, porque se que les puede parecer interesante.
Estaba de visita en la casa de mi "hermano" Carlos Adriano, un gran mago rosarino que también vive aquí en España.
En cierto momento, mi hija se mete en su habitación, y sale con un muñeco de ventriloquia. Era un muñeco de los "de palo" (stick figure). Yo nunca había tenido uno en mis manos. Tengo en casa un par de "puppets", de los tipo títere, de mano en boca (no se el término técnico en castellano), pero nunca había visto uno de los otros de cerca.
Después de pedir el pertinente permiso a su dueño, me lo senté en la rodilla, meti la mano por su espalda, aferré el palo, y me apoderé de los mandos.
En cuanto ese muñeco giro la cabeza, y me miro a los ojos, sentí una cosa tan maravillosa como indescriptible.
Parecía que había tenido uno de esos toda la vida, y de forma intuitiva, desdoblé mi personalidad, y comencé a improvisar una animada conversación con él, para deleite de mi hija, y sorpresa de mi amigo Carlos, que empezó a proferirme una larga serie de insultos (siempre desde el cariño y la confianza), porque a él siempre le había costado muchísimo desdoblarse, y por eso nunca incursionó en el campo de la ventriloquia. Y según él, a mi se me daba de forma natural.
Esa misma noche, cuando llegué a casa, me compré un muñeco de ese tipo en E-bay.
La semana que tardó en llegarme desde Estados Unidos, me pareció un año, y en cuanto lo tuve, empecé a jugar con él, y a practicar.
Hace un par de meses, un amigo mío que tiene un restaurante para despedidas de solteras en la Gran Vía de Madrid, me dijo que le gustaría que vaya a hacer magia en el espectáculo de su local, pero que quería que hiciese un numero de ventriloquia con mi muñeco.
Así que en un par de semanas, escribí un guión de unos 8 minutos, bastante picante, para ese tipo de público, y personalicé el muñeco para que se adapte a la personalidad que yo le quería dar.
Venía con una peluca pelirroja de lana bastante fea, que parecía una alfombra, y un traje como de chino, también bastante feo.
Le mande a hacer una peluca negra a medida (que me costó una fortuna), le puse una barbita parecida a la mía, unos vaqueros, y una camiseta de Argentina. Lo bauticé con el nombre de "Mafaldo", y es un amigo mío que acaba de llegar de Argentina, que tiene mucho mas acento argentino que yo (que lo tengo bastante "limado", después de casi 20 años en España) y es muy sinvergüenza, seductor, y políticamente incorrecto en todos los sentidos.
(Intentaré poner aqui una foto suya, si soy capaz)
Ya llevo casi un mes haciendo mi rutina con él en el restaurante, y es un éxito rotundo con el público.
Estoy recién empezando con la ventriloquia, y me queda todo por aprender, pero me apasiona, y me siento increíblemente cómodo haciéndolo.
Se que en Sudamérica y en Estados Unidos es un arte muy popular, y hay mucha gente aficionada a ello, pero aquí en España hay muy poquita gente que lo haga, y menos aún que lo hagan bien. Por eso me interesé en este foro, para tener gente con quien compartir mis experiencias, aunque sea a la distancia.
Espero no haberlos aburrido mucho con mi presentación.
Encantado...
Mi nombre es Christian Miró (para los argentinos, nada que ver con "Cris Miró"... por suerte o por desgracia, ese es mi nombre verdadero).
Soy argentino, pero vivo en España desde hace casi 20 años (y tengo 39)
Soy mago profesional, y tengo la suerte de vivir de ello desde hace bastante tiempo. Tengo una tienda y escuela de magia en "Parla", el pueblo donde vivo, a las afueras de Madrid.
Soy el presidente de AMAPE (Asociación de Magos Aficionados y Profesionales de España).
Mi especialidad es el mentalismo cómico. Es con lo que mas trabajo, y ademas de los espectáculos, viajo por casi toda España, dando conferencias para magos sobre como meter humor en el mentalismo, y en la magia en general.
Hace un par de años, empecé a estudiar la técnica de la ventriloquia por pura curiosidad profesional. Nunca pensé en dedicarme a ello.
Pero hace unos meses, tuve una experiencia casi mística, que les voy a contar, porque se que les puede parecer interesante.
Estaba de visita en la casa de mi "hermano" Carlos Adriano, un gran mago rosarino que también vive aquí en España.
En cierto momento, mi hija se mete en su habitación, y sale con un muñeco de ventriloquia. Era un muñeco de los "de palo" (stick figure). Yo nunca había tenido uno en mis manos. Tengo en casa un par de "puppets", de los tipo títere, de mano en boca (no se el término técnico en castellano), pero nunca había visto uno de los otros de cerca.
Después de pedir el pertinente permiso a su dueño, me lo senté en la rodilla, meti la mano por su espalda, aferré el palo, y me apoderé de los mandos.
En cuanto ese muñeco giro la cabeza, y me miro a los ojos, sentí una cosa tan maravillosa como indescriptible.
Parecía que había tenido uno de esos toda la vida, y de forma intuitiva, desdoblé mi personalidad, y comencé a improvisar una animada conversación con él, para deleite de mi hija, y sorpresa de mi amigo Carlos, que empezó a proferirme una larga serie de insultos (siempre desde el cariño y la confianza), porque a él siempre le había costado muchísimo desdoblarse, y por eso nunca incursionó en el campo de la ventriloquia. Y según él, a mi se me daba de forma natural.
Esa misma noche, cuando llegué a casa, me compré un muñeco de ese tipo en E-bay.
La semana que tardó en llegarme desde Estados Unidos, me pareció un año, y en cuanto lo tuve, empecé a jugar con él, y a practicar.
Hace un par de meses, un amigo mío que tiene un restaurante para despedidas de solteras en la Gran Vía de Madrid, me dijo que le gustaría que vaya a hacer magia en el espectáculo de su local, pero que quería que hiciese un numero de ventriloquia con mi muñeco.
Así que en un par de semanas, escribí un guión de unos 8 minutos, bastante picante, para ese tipo de público, y personalicé el muñeco para que se adapte a la personalidad que yo le quería dar.
Venía con una peluca pelirroja de lana bastante fea, que parecía una alfombra, y un traje como de chino, también bastante feo.
Le mande a hacer una peluca negra a medida (que me costó una fortuna), le puse una barbita parecida a la mía, unos vaqueros, y una camiseta de Argentina. Lo bauticé con el nombre de "Mafaldo", y es un amigo mío que acaba de llegar de Argentina, que tiene mucho mas acento argentino que yo (que lo tengo bastante "limado", después de casi 20 años en España) y es muy sinvergüenza, seductor, y políticamente incorrecto en todos los sentidos.
(Intentaré poner aqui una foto suya, si soy capaz)
Ya llevo casi un mes haciendo mi rutina con él en el restaurante, y es un éxito rotundo con el público.
Estoy recién empezando con la ventriloquia, y me queda todo por aprender, pero me apasiona, y me siento increíblemente cómodo haciéndolo.
Se que en Sudamérica y en Estados Unidos es un arte muy popular, y hay mucha gente aficionada a ello, pero aquí en España hay muy poquita gente que lo haga, y menos aún que lo hagan bien. Por eso me interesé en este foro, para tener gente con quien compartir mis experiencias, aunque sea a la distancia.
Espero no haberlos aburrido mucho con mi presentación.
Encantado...
Re: saludos desde Madrid
para nada aburriste Christian, espero te sientas a gusto, ahora la idea es reflotar este espacio que nos auna un poco a los ventris del pais y del exterior.
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